El día de bodas de Arianne y Xavier en Club Nautico de San Juan fue sumamente especial para mi. No solo porque ellos son guapísimos, encantadores, y su boda fue pura belleza, pero también porque su evento es de esos que amarran muchas etapas y memorias de mi vida personal y profesional en un solo día.

Hace mucho tiempo estuve en contacto con Arianne para su día de bodas. Ella es, como muchas de mis clientas, una de esas novias bien estructuradas que planificó su boda con mucho más de un año de anticipación. Si no me equivoco, conectamos por primera vez (en nuestra vida adulta) a partir de la boda de los chulísimos Patricia y Gaby en el 2018. Pero la realidad es que nos conocemos desde mucho antes, ya que estudiamos en la misma elemental y tenemos muchos contactos en común.

Dado a que son diasporicans, toda nuestra comunicación y planificación durante esos dos años fue online, pero finalmente tuvimos la dicha de compartir en persona los tres en su sesión Love Story en el Royal Isabela la misma semana de la boda. La dinámica fue tan divertida y relax, que esto sentó tremendas expectativas de lo mucho que nos divertiríamos el día de la boda.

Preparación de los Novios en La Concha Resort

El día de Arianne y Xavier prometía ser tan bello, como tan intenso. Ese día comenzamos un poco más temprano de la cuenta en La Concha Resort, para la preparación de Arianne. Allí me reencontré con una hermosa y alegre novia ready para casarse, junto a un grupo de damas energéticas, sus padres y su abuelita. Allí también me encontré con Liliana Albizu, su coordinadora de bodas, con quien era mi primera experiencia trabajando juntas.

Teníamos casa llena, pero fue súper fácil navegar por la preparación, ya que la habitación era grande y teníamos un balcón cómodo para poder fotografiar accesorios y detalles sin interrumpir el proceso de preparación que ocurría adentro. Cuando Arianne estuvo lista, nuestra atención cambió hacia ella y su interacción con sus seres queridos.

En ésta ocasión, por cuestiones de logística, no documentamos la preparación para Xavier como regularmente haríamos, sino que le hicimos un photoshoot en la iglesia mientras esperábamos a Arianne. Allí también llegaron sus familiares y caballeros, así que aprovechamos para hacer unas fotos grupales.

Fotos de Ceremonia en Parroquia Stella Maris

¡Llegó Arianne en el volky anaranjado! Así que salí a la entrada principal a recibirla, y para mi sorpresa, ¡teníamos audiencia! La escena de Arianne llegar a la iglesia con su enorme velo catedral, era tan majestuosa, que las personas recreándose en la Plaza frente a la iglesia, comenzaron a vitorear y aplaudir. ¡Que chulería!

La ceremonia fue una hermosa, llena de lágrimas y carcajadas, realmente se podía sentir en el ambiente cuan amada es la pareja, y también la alegre personalidad de los allí presentes. Ya, luego de 11 años fotografiando bodas, uno puede sentir cuando espera un gran día solo por la actitud de las personas durante la ceremonia. Esa noche, ¡nos deparaba un buen party!

Fotografia de Boda en Club Nautico San Juan

Luego de la ceremonia y los retratos grupales formales en Stella Maris, conducimos hasta nuestro destino final ese día: El Club Náutico San Juan, en donde serían las fotos de recién casados de Arianne y Xavier, el cóctel de bienvenida (con lechón incluido), y la recepción con fiesta y cena.

El día estaba intensamente caluroso todavía, así que como no teníamos prisa dado a un itinerario de bodas bastante generoso, comencé por fotografiar la decoración la recepción. Al igual que el resto de los elementos del día, en la decoración hecha por Anabel de Glow Events tenía texturas rústicas pero detalles de lujo para un tema náutico-glam. Llegaron los novios, así que hicimos un primer set de fotos de recién casados dentro del salón, y luego nos escapamos para los muelles. Tuvimos la suerte de que uno de los botes estaba recién llegando a puerto, y su capitán nos dio permiso para hacer fotos en el bote. Una vez la fotógrafa y los novios estuvimos satisfechos, entramos a la rececpión, la cual comenzó con románticos bailes y emotivos brindis, y siguió con un party interminable.

En la recepción pude reconectar y fotografiar mucha gente linda que estudió conmigo en la escuela elemental, y con mis pasados clientes Patricia y Gaby que también estaban por ahí. Mi turno terminó con Yuvi Plena, que nunca fallan en montar una buena fiesta. Fue un día muy alegre, y ahora en tiempos de pandemia, lo recuerdo con mucho cariño y no puedo esperar a cuando pueda volver a documentar bodas como la de Arianne y Xavier.

xo,

Cami