Ok, quizás me fui un poco dramática con el título, pero es que apenas una semana antes del inicio de la cuarentena por COVID-19 en Puerto Rico, la boda de Alondra y Francisco en Hacienda Campo Rico fue mi última boda grande. Y por mucho tiempo por los meses siguientes, se sintió como la última de mi carrera. Habiendo salido del evento súper enamorada de las fotos y del día que allí vivimos, varias semanas más tarde no podía ni tan siquiera verlas sin sentir un gran dolor en mi pecho. Y ese dolor, acompañado de mucha incertidumbre relacionada al futuro en la industria que tanto amo.

Esperanza y Sanación

A seis meses de ese día, y tras muchos procesos de reinvención y desarrollo de nuevos caminos, ésta semana solo podía pensar en la boda de Alondra y Francisco. Reflexionaba como posiblemente esa fue la última celebración de muchos de los allí presentes.

Donde hace meses veía nostalgia y tristeza, ahora veo esperanza. Me di cuenta que estaba sanando, y que una vez más podía ver esas fotos y recordar el día con agradecimiento de haberlo trabajado y esperanza de que el futuro nos tiene muchas más celebraciones por delante. ¡Así que hoy les comparto el gran día de Alondra y Francisco!

Preparación de Los Novios en Hotel Verdanza

Mi día comenzó en la habitación de Francisco, donde lo acompañaban su séquito y sus padres. Luego de hacer unas fotos individuales y retratos con todos los allí presentes, hubo un intercambio de regalos y un set de fotos más espontáneas. Me encantó el look de Francisco, muy apropiado para una boda de Hacienda, y con un twist divertido con el bowtie en corcho y calcetines de colores.

Luego de hacer éste set, me moví a la habitación de Alondra, en donde quedé enamorada de la atención al detalle de la pareja. No solo estaba totalmente decorada la habitación, sino que cada detalle de la vestimenta y look de las damas, se había planificado para las fotos de preparación. También allí estaba la Perrita de Honor™  quien al igual que en su Love Story en las Ruinas de Aguadilla fue excelente modelo y proveedora infinidad de momentos adorables y espontáneos.

Me encantó lo detallistas que fueron Francisco y Alondra con su séquito, les tenían obsequios para la sesión de fotos y artículos esenciales para sobrevivir la fiesta que mas tarde experimentaríamos.

 Boda Rústica Chic en Hacienda Campo Rico

Una vez terminadas las fotos de la hermosa Alondra y su séquito, salimos hacia la Hacienda Campo Rico, en donde nos esperaba Francisco para la sesión first look. La boda tenía muchos invitados, y para alivianar la carga de fotografías que habría que tomar luego de la ceremonia, hicimos un primer set de retratos de pareja antes de que el evento comenzara.

El día amenazaba con lluvia, y si bien tuvimos suerte y nunca llovió, los novios decidieron llevar a cabo la ceremonia en la terraza del segundo nivel de la Hacienda Campo Rico. Luego de la emotiva ceremonia, tuvimos un set de fotos familiares y del séquito, tras lo cual me robé los novios por unos minutos para completar su sesión de recién casados. Luego de cumplidos todos nuestros objetivos, los novios se fueron a disfrutar del coctel con sus invitados, y yo, a fotografiar la hermosa decoración en tonos naranja, verde y acentos dorados.

Una vez cayó la noche, comenzó la recepción con los bailes y brindis, y luego rápidamente se convirtió en tremendo fiestón. Antes de irme a casa, llegaron los pleneros de Yuvi Plena, con los cuales nos gozamos el evento hasta el último minuto.

Espero que se disfruten este set tanto como yo disfruté el capturarlo. A los compañeros de la industria, y a las parejas que esperan para comenzar a planificar su día de bodas, les envío un abrazo solidario. El novel coronavirus vino a cambiarnos nuestras vidas, pero mientras ésta etapa dure, debemos aferrarnos a hermosas memorias con esperanza de que todavía nos quedan muchas fiestas por celebrar.

xo,

Cami